VIVIR ENTRE SOMBRAS LUEGO DE VER LA LUZ.
Cuando
nos enfrentamos a un incidente crítico como un accidente, el diagnóstico de una
enfermedad grave, el fallecimiento de un familiar, una emergencia masiva, una catástrofe
o un desastre natural, todos nuestros recursos se ponen a prueba y en ocasiones
nos sentimos desbordados; más aún cuando, como consecuencia de dicho incidente,
algún familiar o amigo adquiere una discapacidad.
Teniendo
en cuenta la temática de este espacio, voy a centrarme en las implicaciones que
tiene para cualquier persona, su familia y sus amigos el adquirir una
discapacidad visual a consecuencia de un incidente crítico:
En
primer lugar, es importante entender que la persona que acaba de perder la
visión tiene que vivir un duelo, tiene que afrontar una pérdida; no acaba de malgastar
una moneda ¡Acaba de perder el sentido que le suministra el ochenta por ciento
de la información del mundo externo! Considero necesario que se propicien
espacios para la expresión emocional, el llanto, para vivir el duelo que esta
pérdida supone.
En
ocasiones es posible observar que la familia y allegados comienzan a modificar
su forma de tratar a quien acaba de adquirir la discapacidad, infantilizándole
y generando conductas de sobreprotección y excesiva dependencia: esto no contribuye
de manera positiva al proceso de afrontamiento, pues puede propiciar que la
persona se estanque, que sienta que ha perdido su valía, que ya no tiene nada
que aportar a la sociedad, que se ha convertido en una carga para su familia…
Su amigo, su vecino, su familiar ciego sigue siendo el mismo que hace unos
meses, la misma persona que antes podía ver; ahora vive un proceso de transición,
de adaptarse a una nueva realidad en medio de la oscuridad, pero en esencia no
ha dejado de ser quien es; no es un niño viviendo en el cuerpo de su amigo o
familiar, es esa persona adaptándose a un mundo de sombras.
Otro
aspecto importante tiene que ver con la red de apoyo: es fundamental el
contacto con otras personas que hayan vivido una situación similar; ayudará a
la persona ciega y a su familia el saber que no están solos, que otros ya han
vivido situaciones parecidas y se han sentido igual que ellos; además, el
conocer las estrategias de afrontamiento que otras familias han utilizado, les
servirá para generar su propia forma de afrontar la discapacidad, empleando los
recursos disponibles.
En
cuanto al proceso de rehabilitación, es un error centrarse únicamente en el
aprendizaje del sistema Braille o de las técnicas de orientación y movilidad.
El proceso de rehabilitación debe ser integral e interdisciplinar, respetando las
particularidades de cada sujeto: una persona ciega que viva en un pueblo pequeño
no necesita aprender las mismas cosas que otra persona que viva en una gran
ciudad.
Para
finalizar, quiero referirme a las comparaciones: todas, en cualquier contexto,
son profundamente odiosas; no haga sentir culpable a su amigo o familiar porque
otras personas logran hacer de manera autónoma actividades para las que él o
ella aún requiere ayuda. No todos funcionamos igual; no todos aprendemos igual.
Cada quien avanza a su ritmo y en sus tiempos.
Me
despido con una frase que me dijo un amigo que es ciego desde hace cinco años: “La
vida es hermosa, aunque sea oscura”.
Si
conoces a una persona que acaba de perder la visión, cuéntanos tu experiencia
en los comentarios. También te invitamos a compartir nuestro contenido.
Mi mamá se está quedando ciega estos días ya. Tiene retinitis pigmentaria y 72 años. Está viendo personas y cosas que no hay.
ResponderBorrarSaludo cordial:
BorrarEs muy importante para ella poder sentir su apoyo y el de otros familiares o amigos. No olvide los controles médicos y el trabajo de rehabilitación, para que se recupere la independencia y autonomía perdidas; también pueden buscar ayuda con otras personas con discapacidad visual que sean adultos mayores. Por último, busquen la ayuda de un psicólogo tanto para su mamá como para ustedes los familiares, siempre es bueno potenciar las estrategias de afrontamiento.
Espero poder haber aportado positivamente a este proceso que están viviendo.